El impacto de la actual crisis CoVid-19 en la aviación comercial

El lunes 1 de junio la OACI dio a conocer los resultados de los trabajos de la task force creada ad hoc, conocida por su acrónimo CART, para adaptar mundialmente la aviación comercial al escenario derivado de la Covid-19. La Organización Mundial de Turismo, junto con otras organizaciones hermanas de Naciones Unidas como la OMS o la Organización Mundial de Comercio fue invitada a participar. Los trabajos han sido muy intensos, como así lo demanda la urgencia del momento, estamos ante la crisis mundial más grave desde la Segunda Guerra Mundial. La reactivación de la economía mundial no será posible sin la puesta en marcha de la aviación tras lo que ya se conoce en el mundo anglosajón como el Great Lockdown (el gran confinamiento global). 

La caída del PIB mundial para 2020 no tiene parangón, existe el consenso que se moverá en el entorno del -4%,  economía, el de la aviación comercial según la previsión de IATA será del -48% en pasajeros (medidos en RPK). Para el Turismo contemplamos en la OMT tres escenarios, dependiendo de cuando se inicie el levantamiento de las restricciones de viaje debidas a la pandemia. La totalidad de los 217 destinos del mundo han implementado en mayor o menor medida medidas restrictivas en sus fronteras. Desde la OMT monitorizamos este importante indicador y lo hacemos público regularmente. No es un trabajo fácil, como se puede comprender, pero es necesario. Volviendo a nuestros escenarios previstos, nos moveremos en un entorno del -58% al 78% en llegadas internacionales. 

Estas cifras, nunca imaginadas, nos dan una idea de la importancia de los trabajos del CART. Las principales líneas han quedado reflejadas en las guías marco que aprobó el 28 de mayo el Comité de Crisis Global convocado por la OMT y en el que participan actores relevantes como OACI, IATA, ACI, o la OMS e IMO. La finalidad es armonizar y coordinar los protocolos y procedimientos mundiales para acelerar la recuperación.  Reseñar todas no es el objeto de este artículo, pero me gustaría destacar algunas como: 

  1. a) incrementar la frecuencia de la limpieza de las aeronaves y de la cabina; 
  2. b) implementar procesos de embarque y desembarque (como el uso de las puertas delanteras y traseras) que reduzcan el contacto con otros pasajeros y la tripulación de vuelo; 
  3. c) limitar el movimiento en cabina durante el vuelo; o 
  4. d) simplificar los procesos de catering al objeto de que el movimiento de la tripulación y la interacción con los pasajeros sea menor.  

Se han buscado medidas que garanticen la seguridad sanitaria de las personas, al tiempo que distorsionen lo mínimo las operaciones aéreas. 

Ahora todos los actores, ya sea en la Aviación, ya se a en Turismo, buscan preguntas en este mar de incertidumbres, hay demasiadas variables a analizar, y no hay un precedente similar. La crisis financiera y económica de 2008 o la del SARS en Asia pueden servir como primera aproximación, pero para tener una idea del momento en el que vivimos, la caída de la demanda de viajes internacional fue del 4% (2009) y 0,4% (2003) respectivamente. Nuestro panel de expertos, más de 300, señalan que la recuperación empezará ya entrado el 2021. Está claro que la recuperación en Turismo no será en “V”, si no lenta, pero también que por muy profunda que sea la crisis, el Turismo se caracteriza por su enorme resiliencia y que es un potente generador de prosperidad para las naciones, especialmente las más desfavorecidas. 

Por Manuel Butler Halter

Director ejecutivo de la Organización Mundial del Turismo (OMT).

Observador en el CART por la OMT